15 de agosto de 2021
Solemnidad de la Asunción de la Santísima Virgen María
Esta pagina fue actulizada el 25 de junio
Meditación del Evangelio
Toda la Liturgia de hoy está llena de un profundo sentido de alegría. La antífona de entrada es un ejemplo de ello: “Alegrémonos todos en el Señor y alabemos al Hijo de Dios junto con los ángeles, al celebrar hoy la Asunción al cielo de nuestra Madre la Virgen María”. A este ambiente de gozo se unen las tres lecturas. El Apocalipsis nos describe, a vivos colores, la misteriosa visión de la mujer y el dragón. La Primera carta a los Corintios afirma la resurrección de los muertos y nuestra esperanza de resucitar. El Evangelio de San Lucas nos llena de gozo al escuchar la apertura y confianza de María a los planes de Dios en ella.
El Papa Francisco agrega estos puntos de reflexión con referencia a esta Solemnidad: “La Iglesia hoy nos invita a contemplar este misterio. Este nos muestra que Dios quiere salvar al hombre por completo, alma y cuerpo. --- La asunción de María, criatura humana, nos da la confirmación de nuestro destino glorioso. --- Nuestro cuerpo, transfigurado, estará allí. Esto --- la resurrección de la carne --- es un elemento propio de la revelación cristiana, una piedra angular de nuestra fe” (8/15/2018). Mientras llega este día de ver a Dios cara a cara, me uno a María y proclamo la grandeza del Todopoderoso: “Proclama mi alma la grandeza del Señor, y mi espíritu se alegra en Dios mi Salvador, porque se fijó en su humilde esclava, y desde ahora todas las generaciones me llamaran feliz” (Lucas 1:46-47). Pidamos a la Virgen María, en esta Eucaristía, que interceda ante su Hijo por nosotros. ©LPi
ORDO
Notas del Fin de Semana
Introducción
De vez en cuando una solemnidad, como la Asunción, cae en domingo; esto le da más relevancia a esta fiesta especial de María. Al final de su vida terrenal María fue asunta al cielo por Dios; ahí reinará ella hasta el final de los tiempos. Desde los comienzos de su vida en la tierra la Bienaventurada Virgen María, concebida inmaculadamente, cumplió la voluntad de Dios hasta el final. Tomémosla de modelo mientras tratamos de discernir la voluntad de Dios para nosotros.
Oración Universal (Peticiones)
Por la Iglesia, para que continuemos poniendo nuestro empeño en la obra de Dios en el mundo, roguemos al Señor.
Por la paz del mundo y por todos los que han sufrido agobiados por los conflictos, la violencia y la división, roguemos al Señor.
Por todos los seres humanos, desde los niños aun sin nacer hasta los ancianos, para que la dignidad de su vida proclame la grandeza del Señor, roguemos al Señor.
Por los orgullosos y egoístas, para que dediquen un tiempo en su vida para atender las necesidades de los demás, roguemos al Señor.
Para todos los enfermos, por todos los que sufren de COVID-19, y por todos los que han muerto, roguemos al Señor.
Elevemos en silencio las oraciones que guarda nuestro corazón, tanto las que hemos expresado verbalmente como aquellas que han quedado en nuestro interior, roguemos al Señor.